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Welcome, miniskirt!

Welcome, miniskirt!

Las minifaldas son tendencia y llegan hoy para quedarse, son una de las tendencias principales para esta temporada primavera-verano 2022. Y a pesar de que tienen un largo camino en la historia, hoy siguen más vivas que nunca. 

 

 

Todo empezó allá por los años 60’s cuando modelos, cantantes y actrices se sumergieron por primera vez en el universo de las minifaldas. Una gran novedad para esos años y que revolucionó no solo la época sino la carrera de muchas, como Twiggy, Brigitte Bardot, entre otras. Mary Quant es conocida por la creadora de esta prenda, pero lo cierto es que muchos diseñadores están atrás de las mini faldas como André Courreges, Paco Rabanne, etc.

 

Llegaron los 2000 y la esencia de las minifaldas se mantuvo intacta. Esta prenda se filtró por todos los escenarios y el público la recibió con los brazos abiertos. Desde Britney Spears, Christina Aguilera, Beyoncé, Lindsay Lohan, Cindy Crawford y muchas mujeres más la sumaron a sus looks. Y obviamente fueron protagonistas en las alfombras rojas y en películas.

Hoy, el legado estético de la minifalda se encuentra en su punto más alto, y la veremos adquirir una silueta inusual o tornarse extra corta. Reduce su extensión al mínimo posible, a la vez que proporciona versatilidad para acudir a la oficina y se arraiga a las propuestas estilísticas del mix & match

Estas últimas semanas de la moda, hemos visto a la mini falda aparecer en varias colecciones y así llevarse todas las miradas. La minifalda será, sin duda, la pieza imprescindible de la temporada primavera-verano 2022, y así es cómo se llevará en los meses venideros.

 

Las minifaldas más cortas que nunca

Miu Miu dio el puntapié inicial para que está prenda sea aún más “mini”. La última colección nos sorprendió con un ejercito de modelos que lucían minifaldas muy pero muy cortas y croptops que dejaban ver toda la panza. Con un estilo puramente inspirado en el ‘workathleisure’, captaron la atención de muchos y se vitalizaron en cuestión de segundos. 

Chanel, Balmain y Blumarine, también re-interpretaron este clásico haciendo que el largo ‘extra corto’ sea protagonista absoluto. 

 

Un guiño al maximalismo y a la estridencia

Esta temporada vimos que las firmas apuestan por modelos que se distancian de las creaciones clásicas, experimentando de esa manera con la fusión de los recortes, el drapeado y las aberturas, juegos cromáticos: minifaldas con volúmenes, colores y estampados inusuales. El espíritu disco (clásico de los 60/70’s) no faltó entre los diseñadores como Versace, Loewe, Dolce & Gabbana y Christian Cowan, cada uno con su ADN pero manteniendo los brillos y siluetas de la época.

Las texturas y estampados también se destacaron en esta tendencia. De cuero, con plumas, estampado damero, logomanía fueron algunos de los detalles que se destacaron.

 

 

La supremacía del traje con minifalda

No es fácil incluir esta prenda siendo una maison clásica y con un legado que mantener. Por eso un estilismo recurrente que vimos fue la utilización de un traje sastrero de 3 piezas (blazer, top y falda) para no quedarse afuera. Para diseñadores como Dior, Chanel, Carolina Herrera es importante mantener su estilo e identidad, por lo tanto ir paso a paso con las minifaldas es un acierto. 

Las minifaldas con traje se han propuesto consolidar por todo lo alto su influencia, luciendo un diseño de cintura alta, ceñido al cuerpo y con un cinturón para definir el estilismo.

 

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